Steve Jobs y Steven Wozniak, los cofundadores de Apple hace 30 años, tenían una larga trayectoria como hackers y vivillos (vendiendo un aparatito que estafaba a las compañías telefónicas permitiendo hacer llamadas de larga distancia a precio local), muchos años antes de inventar la compañía que inventaría la computadora personal y directa o indirectamente a todos nosotros.

Hoy Apple es casi más conocida por su increíble iPod, introducido recién a fines del 2001, que por su línea de computadoras Macintosh, que llegaron al mercado recién en enero de 1984, o por las hace mucho fenecidas Apple I, II, III y Liza, que en los primeros años de la compañía cautivaron a todos y lanzaron una revolución que tardaría más de dos décadas en alcanzar al mundo.

Convertida en una marca tan reconocida como Coca-Cola y Federal Express, alabada como una de las mejores compañías del mundo en términos de diseño y calidad, la empresa facturó 14.000 millones de dólares en el año 2005, ganó 1340 millones y se calcula que en el 2006 llegará los 16.000 millones, de los cuales más de la mitad pertenecerán al iPod.

Su supervivencia es más que loable si recordamos que casi despareció a mediados de los años 90, que su sistema operativo –incluso después reconvertido en una versión propia del Unix y que Apple está actualizando más y mejor que el propio Windows (va ya por la versión 10.4.4) apenas encarnó en el 3% de todos los equipos del mundo, su precio es relativamente caro y cada vez son menos los programas que se desarrollan para su uso.

Aunque literalmente Apple no inventó a la computadora su Apple II, que salió a la venta en abril 1977, fue la primera que la gente quiso tener, usar, mostrar y aprovechar. Y la Macintosh, que empezó a diseñarse en febrero de 1981 serviría de plantilla y de germen para todo lo que usamos hoy.

Gran parte de la grandeza de Apple se la debemos a su presidente, Steve Jobs. Si bien durante su tenida o su historia ha cometido errores antológicos como el sistema operativo de la Newton o la Power Mac G4 o Cubo, se ha redimido con mil y otras innovaciones: la linea iMacs, el sistema operativo OS X, y los mas recientes "iPod" y el software "iTunes".

Mientras, Jobs acaba de vender su unidad Pixar a Disney en la suma de 7400 millones de dólares (un gran negocio penando que en 1984 se la adquirió a George Lucas en 10 millones.

Algunos ya temen en el alejamiento de Jobs al mando de la compañía; el cáncer que padeció hace 2 años hacen temer que deje su puesto, derrumbando así el prestigio que él le aporta a Apple. El futuro es impredecible pero nadie duda de que Apple sin Jobs sea casi como un coche sin nafta.

En su mercado inicial, el de las computadoras, Jobs está convencido de que con la crisis que pronto vivirá el sector quedarán sólo cuatro fabricantes, incluyendo a Apple. Se trata de Compaq y/o Hewlett Packard, Dell y Sony. No casualmente Jobs está luchando a muerte contra Sony, que fabrica las computadoras más elegantes del entorno Windows y que según él lo están copiando a mansalva.

De lo que no cabe duda es de que Apple es la única empresa que posee todos los ingredientes de la cadena de valor del producto (hardware, software y sistema operativo), de modo de poder hacerse cargo por entero de la experiencia del usuario.

FUENTE: weblog.educ.ar

Por Sebastián Gryngarten. DIRECTOR DE CUBIKA SA.

El software nacional ya es una realidad que emplea y factura más que muchas otras industrias y la oportunidad que se le presenta a nuestro país para seguir creciendo es muy grande, sostiene el autor. En el mundo se requiere cada vez mayor cantidad de software y no sólo para computadoras. Los desafíos para el Estado, las empresas y el sector educativo.

El esfuerzo de muchos empresarios con gran capacidad de trabajo, la recuperación de la economía local, la nueva legislación para la industria y el impulso de la Cámara de Empresas de Tecnologías de Información (CESSI) han logrado que la producción de software crezca en términos de volumen y madurez y se avance hacia la existencia de un dinámico sector industrial.

En el año 2002 había en la Argentina algo más de 500 empresas que facturaban unos 400 millones de dólares y exportaban por 70 millones. Actualmente se estima que las ventas del sector rondan los 1.100 millones de dólares —alrededor del 0,7% del PBI— y que el empleo —que hacia 2002 llegaba a las 15.000 personas— hoy estaría en torno a las 40.000. Con estas cifras, esta actividad superó, en cuanto a generación de mano de obra, a otras consideradas históricamente estratégicas, como la automotriz.

Durante el 2005 se estima que las exportaciones superaron los 200 millones de dólares. Si bien este notable aumento fue inicialmente consecuencia de la recesión del mercado local, y se vio favorecido por el nuevo contexto cambiario, el interés de las firmas locales por exportar no decae, sino que se intensifica.

Aunque esta se trata de una actividad en la que el costo de la mano de obra es decisivo, existen otros factores a favor de la Argentina que deben aprovecharse. Entre ellos se destacan:

El uso horario argentino. Estamos mejor alineados con las horas de trabajo de la mayoría de las empresas occidentales. Eso no ocurre con otros países que desarrollan software, como la India, por ejemplo.

Contamos con recursos humanos de calidad, formados en excelentes centros de capacitación.

La Argentina es quien está mejor posicionada en cuanto a disponibilidad y calidad de infraestructuras tecnológicas en toda América latina. Esto surge de estudios conjuntos realizados por la escuela francesa de ciencias empresariales (INSEAD), el Foro Económico y el Banco Mundial.

Si bien lo que se ha hecho hasta ahora es importante, la oportunidad que se le presenta a nuestro país para seguir creciendo es muy grande. En el mundo se requiere cada vez mayor cantidad de software, no sólo para computadoras, sino para una multitud de dispositivos que van desde el consumo masivo hasta el instrumental de vuelo.

Para no perder las oportunidades que se nos presentan ya no alcanza con aprovechar la ventaja de los bajos costos, debemos construir una marca país. Este trabajo tiene que profundizarse en los próximos años con el acompañamiento de la industria —que debe seguir mejorando su capacidad productiva—, la formación de más y mejores profesionales y con la certificación en todos los estándares que aseguran la competitividad a nivel global.

Si la Argentina se propusiera en un plazo de cinco años exportar productos de software por mil millones de dólares anuales, esto generaría trabajo para más de 60 mil técnicos especializados. Para lograr esto es necesario que varios actores ocupen su lugar.

EL PAPEL DE LOS ACTORES

El primero es el Estado a través de políticas públicas claras e inmodificables a pesar de cambios de gobierno y color partidario, mediante incentivos a la producción nacional de software y a su exportación. Una de las maneras de incentivar la producción podría provenir, por ejemplo, del uso que haga el propio estado del software fabricado localmente.

También debería contemplar la difusión publicitaria de esta industria en medios internacionales especializados; la multiplicación de las misiones comerciales; la apertura de oficinas de negocios en el exterior; la participación en foros de tecnología y el apoyo a las universidades para la adquisición de conocimientos y actualización profesional.

El segundo actor es el académico y de investigación, los centros tecnológicos y las universidades y el sistema educativo en general. ¿Cómo tener 60.000 profesionales de altísima calificación cuando las tres cuartas partes de los chicos en edad escolar no ven nunca una computadora? En el país hay excelentes centros de formación superior en sistemas, pero cuyas áreas de investigación tienen escasa vinculación con la vida real. La articulación desde la escuela primaria hasta la formación de posgrado debe favorecer la integración con la producción. El tercer actor es, finalmente, el productivo. Un elemento que juega en contra del despegue de esta actividad en nuestro país es la falta de cultura en cuanto a invertir en investigación y desarrollo y articularse con el sector público, en especial con el académico. Cambiar esta realidad será una parte importante del éxito a futuro.

Para eso se requiere también de capitales de riesgo, que en otras partes del mundo han sido impulsores vitales para el crecimiento de mercados como el de los Estados Unidos. Allí los inversores "apuestan" en proyectos de tecnología y son los que definen la posición competitiva del sector de software de su país.

Cuántas veces escuchamos que el tren pasa sólo una vez. En lugar de verlo, mejor es subirse. Más aún si eso nos permite dar un vuelco definitivo hacia la creación de empleo a partir del crecimiento en ciencia y tecnología.

Fuente: www.clarin.com

Un atractivo debate se formó en los últimos días entre dos grandes emprendedores de la actualidad: Caterina Fake, fundadora de Flickr.com, afirmó en principio que "es un mal momento para iniciar una startup"; acto seguido, la gente de 37signals.com no dio vueltas para oponerse a la opinión de Caterina anunciando en su sitio que "Es un gran momento para iniciar un negocio".

El inicio de la "polémica" lo dio la co-fundadora del exitoso sitio de administración de imágenes "Flickr", Caterina Fake, en su blog personal (http://www.caterina.net/archive/000965.html). "Es un periodo terrible para iniciar un negocio", afirmó, dando luego algunas pautas para reforzar su teoría:

1- Todo el mundo está iniciando una compañía: "Es increíble, pero toda persona que deja una empresa tecnológica no se dirige a Google Microsoft, Apple o alguna de ellas, sino que crea su propio negocio. Tratar de operar correctamente en este ambiente es de locos".

2- La competencia también ha conseguido financiación: "Si tu empresa consiguió 5 millones para el proyecto, otra empresa también lo ha hecho. Cada uno quiere triunfar a toda costa, y eso se transforma en una carrera que nadie quiere, por ser exhaustiva y cara".

3- El talento escasea de nuevo: "¡Traté de conseguir un buen programador PHP para Wench.com y no encontré ninguno!"

4- No puedes trabajar mas en la oscuridad: "Nosotros nos iniciamos en una época en la cual nadie iniciaba ningún proyecto. A nadie le preocupaba lo nuestro, excepto a nosotros. Así, nos conectamos enseguida con gente interesada en lo nuestro, clientes, usuarios, comunidades. Uno trabaja mejor cuando no hay nadie mirando sobre tu hombro".

5- La WEB 2.0 no es todo: "No creo que Web 2.0 sea la gran solución que todos creen que es, o que todos esperan".

6- Hay demasiado movimiento: "Lanzamientos, conferencias, fiestas, conferencias. Todas esas cosas son divertidas y grandiosas, pero juntas son una terrible combinación.

A esas declaraciones le llegaron enseguida las respuestas. Desde 37Signals (especialmente David Hanssen) no se hicieron esperar demasiado, y en su sitio web publicaron una réplica a la opinión de Caterina, aunque no fueron los únicos y cientos de blogs y sitios corporativos se sumaron al debate. Aquí, una serie de interesantes réplicas a cada uno de los puntos mencionados por la "señora Flickr":

1- Todo el mundo esta lanzando su empresa/proyecto: "¿Y? ¿Cuándo se vio un momento en el que la gente no lance nuevas empresas? Cuando Nació MS, también estaba (entre otras) DR, lanzando su DOS... Cuando se inició Amazon, B&N tenía más plata, más stock, más experiencia... En casos hispanos, Mercado Libre y DeRemate se lanzaron casi al mismo tiempo, una tercera empresa similar "arrugó" a último momento... ¿Y?

2- La competencia también ha conseguido financiación: "Si tu problema es que otro tiene la plata... Cuando nació Google, ¿no tenía Yahoo! cientos de millones?, ¿no era Altavista un furor en búsquedas? ¿Eso impidió que Brin y Page se lancen al mercado? NO.

3- El talento escasea de nuevo: "¿Y cuando no escaseó el talento? La diferencia es que ahora pueden pedirte mas plata, pero siempre es posible conseguir gente joven, armar un equipo de trabajo y que sean geniales".

4- No puedes trabajar en la “oscuridad": "Es cierto que si salís con una idea atractiva e innovadora al mercado, todos estarán intentando copiarte y mejorarla. En ese caso, si te pasan por arriba y te dejaste estar... jodete".

5- La Web 2.0 no lo es todo: "Cierto, pero úsalo a tu favor, deja que la `competencia con fondos´ se encandile y se ponga a taggear el mundo y vos enfócate en tu idea o producto".

6- Hay demasiado movimiento: "Cierto nuevamente, pero repito, deja que la competencia se encandile con las fotos mientras vos te enfocas en tu idea o producto. No solo será más productivo, sino que iras por mejor camino”.

Fuente: Caterina.net / 37Signals.com / Tecnorantes.com

* La compañía Streamcast, entre otras la propietaria del programa P2P Morpheus, asegura ser dueña de la tecnología utilizada por Skype para sus servicios de telefonía. Por esto, han presentado una querella por violación de leyes de propiedad. Ebay, que recientemente adquirió Skype, no fue incluida en la demanda.

* Avadis Tevenian, responsable del prestigioso interfaz gráfico de Mac OS, decidió abandonar Apple, compañía en la cual trabaja desde febrero de 1997. Por la noticia, la empresa (que recientemente cumplió 30 años) tuvo una baja en sus acciones del 1,3%. Paralelamente, John Rubinstein, director de la división iPod, anunció que también abandonará la compañía en abril.

* La Unión Europea advirtió a Microsoft con prohibir su próximo sistema operativo, Windows Vista, en caso que este incluya un exceso de funciones. La UE menciona, principalmente, el software de búsquedas en internet y de seguridad. En respuesta, la compañía estadounidense aclaró que el navegador se podrá configurar para hacer búsquedas en cualquier motor y que "Vista" no incluirá software antivirus.