Newsletter  /   Número L - 04/06/2006  
 

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 Noticias y artículos de interes
El verdadero software libre

No hay nada más justo que Bill Gates sea el hombre más rico del mundo. ¿Cuál fue el mérito de Bill Gates? Pensó que el software tiene más valor que el hardware. Fue una gran innovación esa de separar el software del hardware. La informática personal estaba naciendo con una Apple computer revolucionaria, que vendían el hardware incluyendo el software “gratis”. Que una empresa ofreciera un estándar a la industria del hardware informativo fue un gran acierto que permitió que el PC creciera vertiginosamente a la vez que los precios bajaban y las prestaciones aumentaban...

En contra de lo que dicen algunos programadores y gurus bienintencionadamente el auténtico software libre es Microsoft (¡aguanta hasta el final antes de insultar!). Microsoft no es un monopolio sino que es un estándar. Sin Microsoft el mundo del PC sería un caos absoluto que haría inservible el PC, un arma para el cambio y la libertad mucho más importante que la red. Aunque evidentemente la red es un auténtico hito en la historia del progreso de la humanidad y de la libertad.

Pero la red no es nada sin los internautas y la independencia y la gestión de la información que estos realizan. Para garantizar la libertad es imprescindible que la gente (los internautas) pueda gestionar información con autonomía y eso solo es posible con la independencia que da el PC. La tecnología P2P precisamente es una alternativa a los intereses de los grandes operadores de la red.

Cuando Sun, Oracle (empresas importantes y admiradas) o cualquier otra empresa de software se escuda en el “software libre” para atacar a Microsoft sencillamente están haciendo demagogia barata. Nadie ha dignificado más el mundo del software y el progreso informático que el pequeño control que sobre el caos ofrece Microsoft. Y además a un coste muy barato, por si no te has enterado lo que pretenden las “grandes” enemigas de Microsoft es comercializar software, a medio plazo, como si fuera un recibo de la luz, te apuesto a que nos sacarían mucho más de lo que nos saca hoy en día Microsoft. De todas maneras creo que en software tenemos que gastarnos mucho más de lo que nos gastamos (para ello claro es necesario que baja el petróleo, la vivienda)...

¿Cuál es el futuro? El futuro es un software libre abierto participativo creado en red con la interacción de miles de programadores (con sueldos estables) con los deseos de los usuarios y los desafíos sociales. Por el momento, lamentablemente, no tenemos ni el conocimiento, ni el contexto económico, que pueda hacer esto posible. Actualmente el panorama se limita a una lucha por capitalizar la inversión bursátil especulativa... El asunto no es acabar con Microsoft para que otros se forren con los despojos y la especulación bursátil que provoque la expectativa de “los ganadores frente a la tiranía del software”... Como ha pasado otras veces y muy recientemente, te empezaran regalándo todo (mientras las acciones sigan subiendo) y al final todo más caro y peor... esa codicia desmesurada maquillada con demagogia sobre el software libre no es el modelo de desarrollo e innovación que necesitamos. Lo que hay que hacer es facilitar la convergencia entre el software alternativo con el estándar que defiende Microsoft y a partir de ahí reconvertir a Microsoft a medio plazo como una empresa pública de código abierto y estándar universal que todos los usuarios financian como ahora.

Microsoft es una gran empresa, el líder del software, el líder del software libre que se financia con una pequeña aportación que periódicamente reciben de los usuarios. Y también Microsoft es software gratis, hay miles de PCs que corren con Windows y Office gratuito-pirata. El mundo del software alternativo es el gran constructor de la Red y el modelo de “fabricación” de software y la tecnología que aportan tiene que ser asimilada en la nueva sociedad de la información pero no nos interesa a los consumidores que triunfen sobre la base de destrozar Microsoft y/o el mundo del PC. Además el software alternativo lo hacen muchos programadores de manera “altruista” (gente absolutamente admirable y necesaria) mientras que de ese esfuerzo se aprovechan grandes empresas que ganan mucho dinero con la expectativa bursátil del crecimiento futuro que venden... No me parece “sano” esta desproporción tan grande entre el altruismo más admirable y los grandes beneficios que aportan a ciertas empresas... Ni tampoco me parece “sano” que empresas de software que mantienen en nómina a miles de programadores tengan que competir con un software alternativo que sirve para financiar los servicios de mantenimiento y el hardware que se incluye con ellos... ¿Y que pasa con el software alternativo que utilizan en China e India que pagan muy poco a sus empleados? Por otro lado, en el mundo del PC hay también mucho software libre y gratuito (freeware, etc) que debería preocuparnos exigir a Microsoft dedique un porcentaje de sus ingresos a incentivar y promocionar esta área también del software alternativo...

Lo que la sociedad quiere y necesita es que el software se convierta en la gran industria y el motor de un mundo con pleno empleo más justo, estable y libre. Para ello es necesario que vayamos dándonos cuenta que es necesario que triunfen los cambios en la creación y financiación del software con sistemas abiertos y participativos controlados por la interacción de programadores, necesidades y usuarios y no exclusivamente por los intereses del negocio fácil especulativo.

Fuente: elintruso.vnunetblog.es

Tres gigantes en busca de un cambio

Si quiere saber en qué estado se encuentra el mundo de la tecnología, lo mejor es examinar los planes de reorganización que anunciaron tres empresas gigantes del sector. Hay un plan para cada gusto y presupuesto. Para salir de su actual aprieto estratégico, Microsoft planea invertir millones; Intel dice que reducirá costos y podará sus operaciones; y Sun Microsystems simplemente intentará mantenerse a flote.

La gran sorpresa la dio Microsoft, que anunció que invertirá el próximo año US$2.000 millones adicionales en nuevas iniciativas estratégicas y de investigación, la mayoría diseñada a lidiar con rivales como Google. Para Microsoft no es mucho dinero. Después de todo tiene US$35.000 millones en efectivo en el banco. Aunque Microsoft no ha especificado de qué manera gastará ese dinero, todo apunta a que intentará remontar la lucha en el mercado de internet, actualmente dominada por Google y Yahoo!. Si GMail, de Google, amenaza con destronar a Outlook, la empresa de Bill Gates debe responder: comprando compañías independientes o desarrollando nuevos productos, y a su vez desarrollar "granjas de servidores" del temaño de una cancha de fútbol, para alojar los servidores necesarios. Todo eso requiere de una buena inversión. Y el anuncio de Microsoft demostró que la empresa hará lo que sea necesario para no ceder su primer puesto, incluso si eso significa enojar a sus accionistas.

En la otra vereda, y como la mayoría de las grandes compañías de Estados Unidos, se encuentra Intel, enfrentando márgenes de ganancias cada vez más escuetos y una creciente competencia de su archirrival AMD, Intel anunció un austero plan de ahorros y reducción de costos: este año planea ahorrar US$1.000 millones.

Durante gran parte de la historia de Intel, AMD había sido sencillamente un mal menor, al que se dominaba fácilmente. Pero, en los últimos años, y ante la fortaleza de algunos nuevos microprocesadores de alta calidad, AMD se ha convertido en una amenaza genuina, ganando más de la tercera parte de ciertos mercados los cuales Intel solía tener para ella sola.

Es decir, Intel dice que para volver a crecer necesita reducirse primero. Se prevé que sus contrataciones desciendan, y que se hagan recortes en cada aspecto de sus operaciones. Después de todo, se producirán las inevitables reestructuraciones.

Con lo que llegamos a Sun Microsystems, una empresa que ni siquiera en su apogeo tuvo la posición de cuasi monopolio que han disfrutado Microsoft o Intel. Ahora, Sun se está esforzando por volver a ser rentable tras pasar los años de posteriores a la burbuja tecnológica en números rojos.

La semana pasada, Scott McNealy, fundador y conductor histórico de la empresa, anunció que renunciará al puesto de presidente ejecutivo, aunque permanecerá en el puesto de presidente de la junta directiva y, como tal, probablemente continuará desempeñando un papel importante dentro de la compañía. El negocio básico de Sun es la venta de servidores, pero el crecimiento de ese sector ha sido débil. Sun afirma que el panorama está cambiando. Los gastos están bajo control y la empresa tiene una serie de máquinas nuevas que espera impulsen una nueva ola de crecimiento.

El nuevo presidente ejecutivo de Sun, Jonathan Schwartz, asegura que la empresa ha hecho todo lo necesario para volver a crecer. No todos en la industria son tan optimistas. De hecho, Wall Street no está impresionada y está a la espera de grandes despidos.

Al contrario que Sun, tanto Microsoft como Intel continúan recaudando miles de millones de dólares en ganancias, y nadie pone en duda que dominarán el sector tecnológico durante mucho tiempo. Sin embargo, no es posible deducir eso del desempeño que han tenido sus acciones. Cien dólares de acciones de Sun adquiridas hace 12 meses valen hoy más de US$140. Es un resultado considerablemente mejor que los casi US$110 que usted tendría con las acciones de Microsoft, o los cerca de US$80 que valdrían las mismas acciones si fueran de Intel.

Por Lee Gomes.

Fuente: www.wsj.com
Extraído de fernandoflores.cl

Sentirse como un programador

Una de las cosas que más me cuesta explicar a la gente no informática con la que me relaciono es la sensación que tienes cuando oyes la llamada del código.

Suele suceder cuando llevas un tiempo sin programar. Puede que durante ese tiempo hayas estado con ordenadores durante diez horas al día, navegando, administrando, leyendo... pero no programando.

Entonces un día, sin previo aviso, te entra el gusanillo. Tienes una idea o decides llevar adelante un proyecto que tenías aplazado y comienza la vorágine.

Al principio, con fiebre extrema, pasas horas aprisionado delante de la pantalla, el teclado echa humo y desarrollas líneas de código a toda velocidad. El síntoma principal es el insomnio, normalmente la fiebre te entra a primeras horas de la noche, y no vas a perder el tiempo durmiendo o cenando. Las únicas distracciones que te permites son levantarte a preparar una cafetera, ya que otro síntoma es el consumo de bebidas estimulantes. Cierras el irc, el jabber, el correo y los feeds por leer se acumulan, todo lo que te pueda distraer es eliminado y solo tienes un objetivo: el código.

La siguiente fase es la de reorganización. En un momento dado te das cuenta que tu mente va más deprisa que el código que generas, antes de entrar en esta fase es al revés, y que deberías parar un momento a generar un código más eficiente, más portable, más legible, algo más estandarizado y que incluso un subversión te vendría bien. Al final pasas del subversión por el tiempo que te llevaría leer tres páginas de documentación y sufres del clásico síntoma de libreritis. Empiezas a organizar clases en librerías, creas apis, renombras variables y desgastas dos milímetros las teclas de copiar y pegar.

La tercera fase es la del piño. Te quedas atascado con un problema, ya que al único que compilan los programas a la primera es a Chuck Norris. Un fallo que no encuentras, una situación que no te habías planteado o cualquiera de los múltiples poltergaist que se encuentra un programador. Llenas el código de printfs, de asignaciones de variables y juras en arameo. Al llegar a esta fase, si no vives solo, tu pareja percibe que no te ha visto últimamente y decide venir a empreñarte con tonterías como "¿qué haces?" o "¿qué te pasa?" justo a mitad de una sesión de debug.

Esta fase se puede prolongar en el tiempo y tu nivel de cabreo sube de forma exponencial, además tu pareja también se cabrea contigo diciendo que la ignoras, que la chillas y que además hay que ir al súper para hacer la compra. La mayoría de divorcios de programadores son provocados por una mala asignación de valores no detectada.

Poco a poco el cabreo se te va pasando, pero el interés por el programa bloqueado también, es en ese momento cuando vuelves a la vida real. Empiezas con las comidas a las horas que toca, ves algo de televisión, incluso duermes, pero... no del todo.

El problema se ha quedado incrustado en tu cerebro en segundo plano, si te concentras un poco incluso le oyes dar vueltas por ahí dentro, y precedido por un toque de trompetas aparece la solución al jodido bug. Da igual lo que estés haciendo o la hora que sea, normalmente las tres de la mañana, vas corriendo al ordenador y tienes una recaída de la fiebre inicial y entre gritos y exclamaciones varias descubres que funciona

Por último tienes el subidón, terminas el programa y la cosa funciona. Buscas gente a quien contárselo, si el programa es complejo te das cuenta de lo bueno que eres y te cuelgas medallas. Caminas por la calle con una sonrisa de oreja a oreja y cuando la gente te mira lamentas que ellos no sepan todo lo que tú has hecho, pero el subidón se pasa y vuelves al letargo. Volverá a pasar un tiempo hasta que tengas tú idea o que el proyecto te apasione y mientras tanto pasaras las horas con tu ordenador esperando, ¿deseando?, que vuelva esa sensación.

En resumen, no se si un programador es un yonki, que tiene que meterse su dosis para tener el subidón de forma periódica, o un enfermo crónico con recaídas en su enfermedad.

Fuente: mitago.net

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 Eventos
  • Metodologías ágiles y XP (Extreme Programming)
    Lugar: Universidad del Salvador, Marcelo T. de Alvear 1337
    Fecha: jueves 22 de junio del 2006, de 18.30 a 21.30 hs.
    Más información: http://www.clubdeprogramadores.com/